"En el límite de la tierra de los hombres, erguido en la cumbre que embrujó sus noches, el joven alpinista yergue su cuerpo y su corazón, su alma y sus sueños.
Una región de nieve y rocas se extiende ante él hasta perderse de vista, en medio del silencio y el misterio infinito."
Gaston Rébuffat

18 de marzo de 2014

DEL MAMPODRE A UBIÑA Y TIRO POR QUE ME TOCA...

Lo bueno de vivir, trabajar y "desfogar" en Los Picos y La Cordillera, es que todo está muy a mano, tanto que no da tiempo a que te huela la térmica si no pasas por casa en dos días. O será que me estaré acostumbrando a mi mismo!? Va a ser eso...

Esta temporada será recordada por el acoso continuo al Mampodre. Las buenas condiciones en La Peña del Medio Día, tanto en la mítica Dama Blanca como en la Norte Directa, así como en la Noreste, han hecho que las repeticiones se sucedan a ritmo de Directa de Los Martínez en El Picu, y que tres nuevas vías hayan nacido en su cara más oriental.

Después de conocer a Chispa y sucumbir a sus encantos, no pude dejar de pensar en ella. Ahora tengo que ir a verla de vez en cuando, tomar algo juntos en la plaza del pueblo y darnos unos mimos. Y claro, no se puede perder el viaje, así que cada vez que quedo con ella, me doy una vuelta por el macizo, tacho vías pendientes, saco fotos y disfruto de este rincón tan especial de La Cordillera.

Ya que quedó pendiente el día del chispazo, volví con Johnny para hacer la Dama Blanca. Edu la había hecho dos días antes en el estratosférico horario de 3 horas 55 minutos, Maraña - Maraña! Total nada!
Mon también la había hecho en 1 hora 12 minutos desde el pie de vía a la cumbre. Ole mineru!
Nosotros, en principio, vamos sin prisa. Aproximamos con calma, de charleta, disfrutando del amanecer.


Primeras luces sobre Los Picos y Peña Ten
En un rellano a pie de pared nos colgamos los cacharros y me pongo la cuerda en aros por si hay que sacarla. Desde aquí parece completamente seca... Se habrá caído todo en dos días?
Cuando nos colocamos justo bajo la entrada vemos que aún hay hielo. Genial!
Sin más, empezamos a escalar...


Primer resalte. Buen hielo

El hielo es bueno y aún está pegado a la roca y los tapines. El Mos recuerda las palabras que hace tiempo le dijo el mítico Arrieta: "Donde esté un buen tapín..."
Qué razón tenía!
Destrepamos la travesía a la derecha para colocarnos bajo la gran canal por la que discurre la vía y seguimos, parándonos para tirar fotos y grabar algún vídeo.


Segundo resalte
Goulotte y pequeña casada





















El hielo es bueno y la vía es una escalera! Si no fuera porque a ratos asoma algo de hierba, cualquiera diría que por aquí han pasado Los Unos.

Llegamos al segundo resalte importante. También muy fácil por los peldaños que tiene. Paso yo a la cabeza y seguimos tras charlar un rato a cerca de un compañero de Johnny que le tiró una cámara de fotos en una vía no se donde... - Eso te pasa por escalar con cualquiera - le digo yo.


Al pie del segundo resalte importante
Estamos gozando como enanos. La vía se encuentra en unas condiciones inmejorables, bastante fácil, muy disfrutona.


Johnny saliendo de este pequeño muro
Se levanta algo de aire y la pared va tumbando cada vez más. Seguimos grabando vídeos, alternándonos para ir delante.
Un último resalte, muy corto, nos deja en la campa final antes de la arista.
Ya no está como hace dos semanas, encostrada de nieve cencellada por el viento. Aún así este final de vía es precioso, con unas vistas inmejorables de La Cordillera y del valle de Maraña.


Remelende, Abedular, Tiatordos, Pierzu, Pileñes, Ten... y Maraña, el pueblo de moda!

Un bonito cresteo con el sol como tercero de cordada y llegamos a la cumbre. Son las 10:00 de la mañana. No nos paramos mucho ya que el viento no es precisamente cálido. Beber, la foto obligada y recoger el material. Hoy la cuerda ha sido un "por si acaso". Nos gusta escalar así de vez en cuando, si las condiciones y la cabeza lo permiten. Hablamos a cerca de ello y llegamos a la misma conclusión...


Las caras lo dicen todo...
Bajamos con calma, disfrutando del paisaje y de la montaña. La cara Noreste es un espejismo de lo que fue, hace apenas dos semanas. Casi todo el hielo se ha caído y solo algunos pequeños muros a la sombra aguantan este frente cálido. Sólo las flores y los brotes de las hayas crecen ahora con el sol.

Comemos un poco de pan y queso en la plaza del pueblo. Johnny ha traído incluso un par de pasteles que devoramos, mientras un paisano del pueblo nos habla sobre la toponimia local.

¿Dónde estará Chispa?. Ahí está!
Nos damos unos mimos y se gana un trozo de queso.

Iosu nos invita a café y chupito en el bar. Un dedal y se nos nubla la vista... No valemos pa ná!

Subimos a la parte alta del pueblo para echar las últimas fotos y despejar la mente. Nos sentamos en un muro donde se está de vicio y disfrutamos de las vistas.


Maraña, lugar privilegiado 
Sin duda, este rincón Leones tiene algo mágico. Poco más se le puede pedir a un día; una buena escalada junto a un amigo, charla distendida con los paisanos del pueblo y la certeza de que mañana, gracias a un oficio maravilloso, volveré a estar aquí, en mi cita con Chispa.


                              ______________________________



Al día siguiente vuelvo a subir el Puerto de Tarna, y aunque esta vez no conduzco yo, es como un déjà vu.
Victor y Manuel me recogen en Gijón y salimos hacia Maraña. Natacha nos espera en el albergue con una cena buenísima. 
Mientras cenamos nos ponemos al día. Hace un año que no sabemos los unos de los otros, desde que hicimos la Norte Clásica de Ubiña.

Después de cenar, café en el bar del pueblo. Charlo con mis recientes amigos: Javi, Iosu, Julián... y a la cama. Es un placer sentirse como en casa.

A las 06:00 suena el despertador. Desayunamos sin prisa y salimos con las primeras luces hacia el valle de Valverde.


Primeras luces sobre El Pico del Pinar (Pico Lago)
Nuestro objetivo es claro. El Corredor Norte de La Polinosa. Una ascensión que, sin ser difícil, tiene todos los ingredientes para disfrutar de una cara norte, sin agobios y con ambiente.

La nieve esta dura por la mañana y en hora y media estamos bajo el cono de entrada, poniéndonos los pinchos, arnés y demás trastos.


Cono de entrada al corredor
Primer resalte. Vistas inmejorables




La huella de las multiples cordadas hacen que la progresión sea más cómoda y los primeros metros los hacemos en corto.

Ahora mismo hay dos resaltes en los que aflora algo de hielo. En ningún caso superan los 60º. 
Bajo ellos monto reunión y tiramos dos largos. Colocar seguros en esta roca es bastante difícil. Se deshace con facilidad y el ancla de nieve se convierte en una gran aliada.

Tras el segundo resalte, llegan Victor y Manuel y seguimos en corto. La pendiente pierde inclinación poco a poco y casi sin darnos cuenta llegamos a la cumbre. Día perfecto y vistas inmejorables sobre la vertiente sur de La Cordillera. Desde Ubiña hasta el Espigüete...y más allá!

Cumbre. Al fondo El Espigüete

A los pocos minutos comienza a llegar un grupo. Dos cordadas más están en el corredor que acabamos de hacer. El Mampodre está de moda.

Descendemos hacia el este, para bajar por la cabecera del valle de Valverde. Hace calor y la nieve se va a ojos vista. Son casi tres semanas de sol y calor, y eso no hay nieve que lo resista.

Contentos con el objetivo cumplido a sus espaldas

En poco más de una hora estamos en el pueblo. Nos cambiamos con calma, disfrutando del sol y del trabajo bien hecho, y salimos hacia Gijón disfrutando de esta primavera adelantada. El Mampodre, sus montañas y sus gentes, son un regalo. Un lugar perfecto para disfrutar, escalar y trabajar, que es al mismo tiempo, balneario, parque de atracciones y la perfecta oficina.


                              ______________________________


Al llegar a casa no deshago ni la mochila. Ana tiene preparada la suya y nos vamos a dormir al Meicín. Hay que aprovechar del sol y de un día en común sin trabajar.
Subimos de noche, con una luna llena de escándalo que ilumina el már de nubes nocturno.

La noche perfecta para caminar...


Tania y Lio nos esperan con una cena buenísima. Mientras la devoramos  charlamos con Fer y Miguel, que mañana van a la Norte Clásica.

Por la mañana, desayunamos con calma y tras preparar las cosas al sol, salimos hacia Ubiña La Pequeña.

Ubiña La Pequeña desde el Collao de Terreros
Como sucede en otros macizos, La Pequeña es la gran olvidada. A la sombra de su hermana mayor, esconde canales y espolones de moderada dificultad, pero que sin duda nos dejaran un gran sabor de boca. Es una montaña realmente estética, con un corte que a nadie deja indiferente ,e ideal para iniciarse en el alpinismo invernal.

Luces y sombras
Subimos por el espolón que surca el centro de su cara noreste. Enlazando canales y pequeños resaltes. Un terreno sencillo pero muy disfrutón.

Canales y resaltes en el centro de la pared
En poco más de una hora llegamos a la arista cimera. Las vistas sobre La Babia y el resto de La Cordillera son inmejorables.

Arista Cimera. La Grande nos mira con recelo...

Estamos cerca de hora y media en la cumbre, comiendo y disfrutando del sol, en manga corta. Las hay que incluso echan un amago de siesta!
Mientras tanto, me dedico a sacar fotos o simplemente a observar...
Localizo a Fer bajando con su cliente, muy cerca ya de Terreros.

Tras la obligada foto de cumbre, nos vamos hacia abajo, usando la huella que hay en la canal central. Pienso en unos esquís y me babo entero!

Dónde mejor...?!

Casi sin darnos cuenta llegamos al refugio, bajo un calor sofocante, teniendo en cuenta que estamos a mediados de marzo. Incluso Ur, el perro de Tania y Lio, ni se mueve de la sombra. 

Ha sido una semana completa, de acá para allá a través de estás montañas que tantas experiencias y satisfacciones nos dan. 
Es domingo y la amenazadora sombra del lunes se cierne sobre algunos... Para mi es distinto. Lunes suele ser sinónimo de descanso, de deshacer mochilas y ordenar el trastero, de comer cada hora. Es el momento de mirar condiciones, posibles escaladas y hacer encaje de bolillos para que cuadren en los días libres de la semana. 

2 comentarios:

  1. Cuando los Ciclopes salen de la entrañas de la tierra, es para asaltar el cielo. Dos buenos robles para fuerte cuña. Me alegro.

    ResponderEliminar
  2. Gracias Mon! No olvides que tenemos una cita...!!

    ResponderEliminar